Más de una docena de misiles impactaron contra el campamento de Ain al-Assad y el de Erbil. El jueves, el ejército estadounidense mató al general Soleimani. La Casa Blanca confirmó los ataques y Trump monitorea la situación.
Irán inició el ataque contra bases que hospeda militares estadounidenses en suelo iraquí. "Esta mañana, corajudos combatientes de la fuerza aérea del IRGC iniciaron una operación con éxito llamada Operación Mártir Soleimani, con el código Oh Zahra disparando decenas de misiles tierra-tierra contra la base de las fuerzas terroristas e invasoras de Estados Unidos", refirió la agencia iraní IRNA.
El asalto del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica es el comienzo de la venganza por el asesinato del general iraní Qasem Soleimani, ocurrida el jueves pasado en Bagdad, durante un bombardeo aéreo de tropas norteamericanas. Además, el ataque ocurrió a la misma hora en la que Soleimani fue muerto con un golpe comandado por drones, también como parte del mensaje de revancha.
La base es el mayor destacamento militar estadounidense en Irak y es un aeropuerto militar con una pista de aterrizaje de asfalto y una longitud de cuatro metros. El aeropuerto está a 230 kilómetros de Bagdad pero es propiedad de Estados Unidos, y se encuentra a dos metros sobre el nivel del mar.
La primera respuesta de Estados Unidos fue de Stephanie Grisham, la secretaria de prensa de la Casa Blanca. "Somos conscientes de los informes de ataques contra instalaciones estadounidenses en Irak. El Presidente ha sido informado y está monitoreando la situación de cerca y consultando con su equipo de seguridad nacional", escribió en su cuenta de Twitter.
Por su parte, Jonathan Hoffman, asistente del secretario de Defensa para Asuntos Públicos, expresó: "Aproximadamente a las 17.30 4(hora del Este) del 7 de enero, Irán lanzó más de una docena de misiles balísticos contra las fuerzas militares y de coalición estadounidenses en Irak".
"Está claro que estos misiles fueron lanzados desde Irán y apuntaron al menos a dos bases militares iraquíes que albergan al personal militar y de coalición estadounidense en Al-Assad e Irbil. Estamos trabajando en las evaluaciones iniciales de los daños ocasionados", continuó Hoffman.